Fotografía de Pr. Eugenio Albrecht - Comunicaciones RED LAC

Resumir en una plana lo que significa participar en la COL como representante de los jóvenes y por sobre todo lo que significó para mí, es bastante complejo. La Conferencia de Liderazgo, es el espacio que tienen los líderes pastorales de cada iglesia (Obispos y Pastores Presidentes) y algunas de las redes de trabajo, como lo son las mujeres y los jóvenes, y que este año se llevó a cabo en Buenos Aires, Argentina. Representar a los jóvenes de la Pastoral Juvenil ILCH, es una gran responsabilidad y un gran orgullo, el trabajo que se ha realizado en conjunto con todos los miembros de esta ya es reconocido entre los jóvenes de nuestras iglesias hermanas en América Latina y el Caribe, escuchar como los jóvenes de otras iglesias quieren asistir a Puerto Fonck es una muestra de ello.

Durante la COL pude conocer la realidad de estas iglesias, las cuales en muchas ocasiones parecieran tan lejanas, sin embargo, las realidades son bastante cercanas. En la zona del Caribe la violencia es uno de los factores comunes, en donde la vida de los jóvenes peligra día a día y que es una realidad que a las iglesias les preocupa de forma constante. En América Latina por otra parte, la pobreza es uno de los factores en común, una realidad que afecta a miles de personas en cada uno de los países que estuvieron representados y que tal vez a algunas iglesias afecta mas que a otras, pero que es un tema sensible para ellas. Al compartir de forma diaria con las personas que nos encontrábamos allí, representando a nuestras iglesias, estas realidades se hacen palpables, cada historia compartida llega al corazón, por un momento es posible desconectarte de todo y sentir aquello que te están relatando, sentir la preocupación que sienten por ejemplo en Honduras o El Salvador, de que muchos de sus jóvenes corren peligro de muerte al estar en las calles más allá de las 17 horas, o la aflicción por muchos niños en Buenos Aires, que ante la lluvia no tienen como abrigarse o un par de zapatos que los proteja para poder ir a clases, debido a la falta de recursos.

Como jóvenes durante la COL manifestamos nuestra preocupación en torno a tres temas que nos afligen y nos afectan día a día. En primer lugar, la educación NO está a la venta, preocupándonos no solo de lo que se refiere a educación tradicional, sino de la educación que en nuestras iglesias estamos entregando, especialmente por nuestros jóvenes y nuestros futuros pastores. En segundo lugar, el reavivamiento de las iglesias, es una realidad que en nuestras iglesias cada día hay menos miembros, por lo tanto, manifestamos la importancia de preocuparnos por nuestros niños y jóvenes, quienes al contrario de como se dice siempre, son la realidad de nuestras iglesias. En tercer lugar, la equidad, en este caso no hablamos de igualdad, porque son distintas, es por esto por lo que manifestamos la importancia de enseñar en nuestras iglesias lo que es la equidad y luego ponerlo en práctica. Estos son los temas que como jóvenes de América Latina y el Caribe creemos que deben ser trabajados durante los próximos años en nuestras iglesias y en las próximas COL y que como red de jóvenes nos comprometimos a trabajar en ellos también.

Sin duda alguna, la COL 2018 ha marcado mi vida, conocí realidades que desconocía o que muchas veces las vemos en televisión, pero que no nos acercamos más a ellas. Conocí a hermosas personas, tuve el gusto de reencontrarme con otras que había conocido en la COL 2014 y que en esta ocasión tuve la oportunidad de compartir con ellas algunas historias, no solo de sus iglesias, sino también personales que dejaron una huella. Lo más significativo sin duda alguna fue que pude palpar que el trabajo que como Pastoral Juvenil ILCH e Iglesia estamos realizando va en buen camino y eso me motiva a continuar trabajando día a día en ello.

Fernanda Zúñiga Keim
Coordinadora Nacional
Pastoral Juvenil ILCH