Pr. Carlos Neibirt – Iglesia Luterana Comunidad del Lago
MISERICORDIAS DOMINI 2021
¿Qué bueno es si alguien está ahí para cuidarnos? Alguien que nos protege. ¿Es importante si hay alguienen quien podemos confiar completamente? Esto es lo que dice Cristo en texto bíblico de la semana (Jn 10: 11a, 27-28a): Yo soy el buen pastor … Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco y ellas me siguen; y yo lesdoy vida eterna.
HIMNO 285 CULTO CRISTIANO 1-2
De tu luz envía el don Con que sea iluminada;Danos Tú, de gracia lleno,
El poder de hacerlo bueno.
SALMO 23
El Señor es mi pastor; nada me faltará.
En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas dereposo me pastoreará.
Confortará mi alma;
Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande envalle de sombra de muerte,
No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayadome infundirán aliento.
Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; Unges mi cabezacon aceite; mi copa está rebosando.
Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, Y en la casa delSeñor moraré por largos días.
ORACION
Dios, eres quien eres para nosotros: un bastón que guía, manteles, bálsamo de rey, defensa ante losenemigos, dueño de la casa.
Tus nombres son muchos más, pero Tu siempre estás para nosotros. Estamos ante Ti así como somos:buscando protección, hambrientos, encorvados, perseguidos, a veces sin dar demasiado frutos. Te pedimos que nos cuides pero nos cuides como un buen pastor a su rebaño. Amen
LECTURA BÍBLICA JUAN 10,11-16
Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.
Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja lasovejas y huye, y el lobo arrebata las ovejas y las dispersa.
Así que el asalariado huye, porque es asalariado, y no le importan las ovejas. Yo soy el buenpastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen,
así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas. También tengo otrasovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un pastor.
HIMNO 285 .3
Nuestro canto y nuestro ruego Sean de tu altar elfuego.
SUGERENCIA: escuchar y leer este himno, está en alemán. https://www.youtube.com/watch?v=gOUpNoXRipY&ab_channel=LittleKyuubiAngel
PREDICACIÓN EZEQUIEL 34,1-16.31
Vino a mí palabra del Señor, diciendo:
Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y di a los pastores: Así ha dicho elSeñor: ¡Ay de los pastores de Israel, que se apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los pastores alos rebaños?
Coméis la grosura, y os vestís de la lana; la engordada degolláis, mas no apacentáis a las ovejas.
No fortalecisteis las débiles, ni curasteis la enferma; no vendasteis la perniquebrada, no volvisteis al redil la descarriada, ni buscasteis la perdida, sino que os habéis enseñoreado de ellas con durezay con violencia.
Y andan errantes por falta de pastor, y son presa de todas las fieras del campo, y se han dispersado.
Anduvieron perdidas mis ovejas por todos los montes, y en todo collado alto; y en toda la faz de latierra fueron esparcidas mis ovejas, y no hubo quien las buscase, ni quien preguntase por ellas.
Por tanto, pastores, oíd palabra del Señor:
Vivo yo, ha dicho el Señor, que por cuanto mi rebaño fue para ser robado, y mis ovejas fueron paraser presa de todas las fieras del campo, sin pastor; ni mis pastores buscaron mis ovejas, sino que los pastores se apacentaron a sí mismos, y no apacentaron mis ovejas; por tanto, oh pastores, oídpalabra del Señor.
Así ha dicho el Señor: He aquí, yo estoy contra los pastores; y demandaré mis ovejas de su mano, y les haré dejar de apacentar las ovejas; ni los pastores se apacentarán más a sí mismos, pues yolibraré mis ovejas de sus bocas, y no les serán más por comida.
Porque así ha dicho el Señor: He aquí yo, yo mismo iré a buscar mis ovejas, y las reconoceré.
Como reconoce su rebaño el pastor el día que está en medio de sus ovejas esparcidas, asíreconoceré mis ovejas, y las libraré de todos los lugares en que fueron esparcidas el día del nubladoy de la oscuridad.
Y yo las sacaré de los pueblos, y las juntaré de las tierras; las traeré a su propia tierra, y las apacentaré en los montes de Israel, por las riberas, y en todos los lugares habitados del país.
En buenos pastos las apacentaré, y en los altos montes de Israel estará su aprisco; allí dormirán enbuen redil, y en pastos suculentos serán apacentadas sobre los montes de Israel.
Yo apacentaré mis ovejas, y yo les daré aprisco, dice el Señor.
Yo buscaré la perdida, y haré volver al redil la descarriada; vendaré la perniquebrada, y fortaleceréla débil; mas a la engordada y a la fuerte destruiré; las apacentaré con justicia.
Y vosotras, ovejas mías, ovejas de mi pasto, hombres sois, y yo vuestro Dios, dice el Señor.
1
Hay una historia según la cual el gran profesor de teología Karl Barth (1886-1968), cuando se le preguntó sipodía describir su fe cristiana en una forma breve, respondió que lo puede hacer con la canción “Porque soy la oveja de Jesús”. Es notable que una persona que ha desarrollado la teología dogmática en unas9.300 páginas en 13 volúmenes pueda dar una respuesta tan simple: Porque soy la oveja de Jesús, solo me alegro de mi buen pastor, que sabe cómo divertirme; quien me ama, quien me conoce y me llama pormi nombre. (Henriette Maria Luise von Hayn, 1724-1782) Quizás Karl Barth
2
¡Hay caos en el rebaño de ovejas! Los animales están dispersos, algunos están heridos, algunas sepierden y otros son débiles, pequeños y endebles, descuidados. No parece ser el estado normal que un rebaño corra como lo conocemos por las idílicas imágenes de pastores, todos juntos, animados y bienalimentados.
Tener un rebaño bien cuidado es un trabajo duro. El estado normal de dejar una manada a su suerte es elcaos. Por eso un pastor debe tener calificaciones muy especiales.
En otras palabras: hay que estar ahí con los ojos abiertos, con todo el corazón y manos enérgicas. En la vida de un pastor no hay momentos en los que puedas decir: ahora no, estoy cansado, hoy no tengoganas, el tiempo está muy malo.
En realidad, solo hay una razón por la que alguien elige ser pastor: porque amas las ovejas y la vida en lanaturaleza. No puede haber otra respuesta que el amor y la pasión.
3
Cuando tengo en mente cuánto amor se requiere para esta profesión de pastor, cuánta paciencia y fuerza,no me sorprende que el profeta Ezequiel eligiera a esta imagen de pastor exacta para hablar de Dios.
De un Dios que nunca se cansa. Que se une a las personas y mantiene unida su creación. De Dios, cuyo amor no solo abraza a los grandes y fuertes, sino que también respeta y valora a los pequeños. El que se enoja e interviene cuando lo que amorosamente ha organizado y creado es simplemente descuidado. O estratado mal.
“Quiero volver a buscar lo perdido y traer de vuelta lo descarriado, vendar a los heridos y fortalecer al débil y proteger lo gordo y fuerte”. Esta es una de las promesas más hermosas y completas que ofrece elAntiguo Testamento, y también nos la ofrece a nosotros.
Buscar lo perdido, recuperar lo perdido, conectar a los heridos, fortalecer a los débiles, proteger a losfuertes. Por un lado, suena lleno de vida, fuerza y poder.
Me imagino un Dios que está en constante movimiento. Siempre vigilante, con ojos como de águila.Siempre activo, lleno de energía.
Por otro lado, hay una gran sensación de seguridad. Tengo ante mis ojos un Dios que está completamente en reposo en sí mismo, que es uno con él y sus acciones, pero al mismo tiempo, también estácompletamente con sus criaturas. Veo manos grandes y fuertes, pero pueden contenerme con cuidado. Yuna mirada cariñosa que mira al rebaño.
Estas imágenes responden al profundo anhelo de salvación y plenitud que llevamos dentro. Al anhelo deque la vida se realize y se proteja. A salvo en las manos de Dios.
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“Quiero buscar lo perdido y traer de vuelta lo extraviado”. Sabemos lo que significa perder algo. Comienzacon cosas pequeñas: llaves, un botón. Y puede ser más grande hasta que la pérdida pueda determinar unavida: cuando pierdes a alguien que amas. O incluso te pierdes a ti mismo.
Entonces puede parecer que la vida ya no es completa, realmente falta algo. Como si lo que se fue, fueramucho más grande que todo lo que todavía está allí. Dios se encuentra con este vacío indescriptible, que puede estar lleno de dolor y tristeza, y Él con su promesa nos dice: allí estoy.
No permito que nada ni nadie se pierda. Me lo llevo todo. Llevo a todos conmigo.
Mi rebaño, dice Dios, el Pastor, está formado por ustedes que están aquí en su mundo. Y de los que yaestán completamente conmigo, en mi mundo. Son un rebaño.
Los mantengo unido, nadie ni nada se pierde. Esta promesa nos da confianza. Nos mantenemos conectados con las personas que ya no están con nosotros y a quienes
todavía amamos. El amor de Dios nos mantiene unidos, de cualquier lado en el que estemos. Es el vínculoque nos une. Incluso más allá de la muerte.
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“Quiero curar a los heridos y fortalecer a los débiles”. Esta palabra es como una acaricia para un almaherida. Si Dios dice que quiere vendar lo que está herido, entonces podemos asumir que no se tratasimplemente de vendar. No es un yeso que se adhiera y prometa una curación rápida. Nuestro Dios que nos sana ve las heridas que son profundas. Que no se puede tratar simplemente con una pastilla o unacrema. También ve las heridas a las que es difícil llegar.
Ezequiel habla de un Dios que está muy cerca de nuestras almas y las cuida. Tomándolo en sus manos yliberando una vitalidad a través de su aliento sanador, dador de vida que va más allá del dolor. Hay mucho consuelo en esta idea. Dios venda las heridas de nuestra alma. Las cura, suave y tiernamente. Pero Dios no solo se enfoca en lo que está herido y débil:
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“Quiero proteger lo que es fuerte”. A menudo lo olvidamos. El pensamiento de que lo fuerte también debeguardarse para que siga siendo fuerte. Cuántas veces la gente piensa en Dios sólo en tiempos difíciles ycuando va todo bien: la vida, la familia y los amigos, el trabajo. Entonces podríamos pensar: la vivacidad yla fuerza son normales y todo lo demás es solo algo pasajero. La debilidad y la enfermedad son excepciones que deben volver a la normalidad lo antes posible. Pero eso no es cierto. Cualquiera que hayaexperimentado lo rápido que se puede complicar la vida, sabe que la fuerza y la vitalidad nunca son algopara siempre. Esta última promesa, “Quiero proteger a los fuertes”, nos recuerda que nuestras vidas deben ser protegidas. Porque nos la dio Dios. No la merecemos, no podemos fabricarlo y no podemos garantizarlopor nuestra cuenta únicamente. Solo podemos recibirlo, agradecer y pedir que sea protegida por quien nos la dio.
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“Quiero volver a buscar lo que se ha perdido y traer de vuelta lo que se ha descarriado, vendar a los heridosy fortalecer a los débiles y proteger lo que es gordo y fuerte”. Esa es
una promesa integral que el Profeta Ezequiel nos da en nuestro camino. . Una promesa de vida que loabarca todo: débil y fuerte, heridas y sanas, muerte y vida. Y en medio de todo, Dios como pastor: con unbastón y una vara. Con alegría en la creación y sin miedo a los días solitarios y brumosos. Con enojocuando el rebaño se ve amenazado, y con bondad cuando Dios los reúne. Dios nos ve; a cada oveja. Nos mira con una mirada amorosa y dice: “Sí, tú eres de mi rebaño, el rebaño de mi prado, y yo quiero ser tuDios”. AMEN
ORACIÓN GENERAL
Dios, tu estás con nosotros. Eres esperanza y futuro, consuelo y vida.
Oramos por aquellos que te necesitan y esperan en ti. Sé un buen pastorpara ellos.
Oramos por los que tienen hambre y sed. Sé un buen pastorpara ellos.
Oramos por aquellos que tienen el alma afligida y y caminan sin rumbo. Sé un buen pastorpara ellos.
Oramos por los que están en caminos oscuros, perdidos. Sé un buen pastorpara ellos.
Oramos por los perseguidos y desplazados. Sé un buen pastorpara ellos.
Oramos por aquellos que están oprimidos y interiormente. Sé un buen pastorpara ellos.
Oramos por aquellos que ya no esperan nada bueno de la vida. Sé un buen pastorpara ellos.
Dios, estás con nosotros. Eres nuestra esperanza y futuro, consuelo y vida. AMEN PADRE NUESTRO
BENDICIÓN FINAL HIMNO 6 HB 1-2