17. DOMINGO después de TRINITATIS 2020
Pr. E. Siegfried Sander – Las Cascadas
SALUDO e INTRODUCCIÓN:
Queridos lectores. Me pidieron escribir este culto para este domingo. Mucho más me hubiera gustado poder predicar en una comunidad y tener el contacto personal con Ustedes. Pero como el coronavirus nos obliga a mantener distancia les saludo desde mi refugio en Las Cascadas citando al apóstol Pablo (Col.2.5:)
“Porque aunque estoy ausente con el cuerpo,
no obstante con el espíritu estoy con vosotros”
Tres advertencias:
Su Pastor emérito
Siegfried Sander
Escuchemos como 1º HIMNO
EN JESUCRISTO SE HALLA LA PAZ
En Jesucristo se halla la paz; En horas negras de tempestad, Hallan las almas dulce solaz, Grato consuelo, felicidad. Gloria cantemos al Redentor Que por nosotros quiso morir; Y que la gracia del Salvador Siempre dirija nuestro vivir. En nuestras luchas, en el dolor, En tristes horas de tentación, Calma le infunde, santo fervor, Nuevos alientos al corazón. Gloria cantemos al Redentor Que por nosotros quiso morir; Y que la gracia del Salvador Siempre dirija nuestro vivir.
Dirigimos nuestros corazones en adoración al misterio de Dios:
GLORIA SEA AL PADRE + AL HIJO + AL ESPIRITU SANTO Como era al principio, es ahora, y para siempre.
Amén
Confesamosque tantas veces nos vence el mundo y no nosotros al mundo.Que tantas veces nuestra poca fe no es muy victoriosa.Que miedos y temores son más fuertes que la esperanza, el amor y la Fe en El.Que vivimos más preocupados y dominados por este mundo que por la presencia de Jesucristo en nuestras vidas. Por eso pedimos: SEÑOR, TEN PIEDAD DE NOSOTROS Kirie eleison La versión que más me gusta: |
ORACIÓN:
O Señor. Ayúdanos a vivir más consciente en Tu presencia. Inspíranos con tu Espíritu Aumenta nuestra poca fe.
Gracias por tu gran misericordia y paciencia con nosotros.
Amén
SALMO de la semana: 138 1 Te alabaré de todo corazón, y ante todos los dioses te cantaré salmos. 2 De rodillas, y en dirección a tu santo templo, alabaré tu nombre por tu misericordia y fidelidad, por la grandeza de tu nombre y porque tu palabra está por encima de todo. 3 Cuando te llamé, me respondiste, y mi alma desfallecida se llenó de vigor. 4 Señor, ¡que todos los reyes de la tierra te alaben al escuchar tu palabra! 5 ¡Que alaben tus caminos, Señor, porque grande, Señor, es tu gloria! 6 Tú, Señor, estás en las alturas, pero te dignas atender a los humildes; en cambio, te mantienes alejado de los orgullosos. 7 Cuando me encuentre angustiado, tú me infundirás nueva vida; Me defenderás de la ira de mis enemigos, y con tu diestra me levantarás victorioso. 8 Tú, Señor, cumplirás en mí tus planes; tu misericordia, Señor, permanece para siempre. Yo soy creación tuya. ¡No me desampares!
Escuchemos el HIMNO “Yo creo en ti, Señor”
o
Más cerca, oh Dios, de Ti, más cerca, sí, aunque sea una Cruz que me lleve a Ti. Si tiende al sol la flor, si el agua busca el mar, a Ti, mi solo Bien, yo he de buscar. Mi pobre corazón inquieto está hasta que en Ti, Señor, encuentre paz. Abráceme Tu Amor, oh Luz de eternidad. Cerca de Ti, Señor, quiero morar. Refugio es el Señor, no temeré. Mi fuerza en el dolor, confío en El. Si brama y gime el mar, las olas al romper, conmigo Dios está, no temeré. Yo creo en Ti, Señor, yo creo en Ti. Dios vivo en el altar, presente en mí. Si ciegos al mirar, mis ojos no te ven, yo creo en Ti, Señor, aumenta mi fe.
REFLEXIONES sobre Mateo 15, 21-28
21 Cuando Jesús salió de allí, se fue a la región de Tiro y de Sidón. 22 De pronto salió una mujer cananea de aquella región, y a gritos le decía: «¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de mí! ¡A mi hija la atormenta un demonio!» 23 Pero Jesús no le dijo una sola palabra. Entonces sus discípulos se acercaron a él y le rogaron: «Despídela, pues viene gritando detrás de nosotros.» 24 Él respondió: «Yo no fui enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel.» 25 Entonces ella vino, se postró ante él, y le dijo: «¡Señor, ayúdame!» 26 Él le dijo: «No está bien tomar el pan que es de los hijos, y echarlo a los perritos.» 27 Ella respondió: «Cierto, Señor. Pero aun los perritos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos.» 28 Entonces, Jesús le dijo: «¡Ah, mujer, tienes mucha fe! ¡Que se haga contigo tal y como quieres!»
Y desde ese mismo instante su hija quedó sana.
REFLEXIONES sobre Mateo 15, 21-28
21 Cuando Jesús salió de allí, se fue a la región de Tiro y de Sidón. 22 De pronto salió una mujer cananea de aquella región, y a gritos le decía: «¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de mí! ¡A mi hija la atormenta un demonio!» 23 Pero Jesús no le dijo una sola palabra. Entonces sus discípulos se acercaron a él y le rogaron: «Despídela, pues viene gritando detrás de nosotros.» 24 Él respondió: «Yo no fui enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel.» 25 Entonces ella vino, se postró ante él, y le dijo: «¡Señor, ayúdame!» 26 Él le dijo: «No está bien tomar el pan que es de los hijos, y echarlo a los perritos.» 27 Ella respondió: «Cierto, Señor. Pero aun los perritos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos.» 28 Entonces, Jesús le dijo: «¡Ah, mujer, tienes mucha fe! ¡Que se haga contigo tal y como quieres!»
Y desde ese mismo instante su hija quedó sana.
Un texto lleno de sorpresas que provoca varios interrogantes y cuestiones:
Primera sorpresa: Jesús no responde… ¿?
Segunda sorpresa: Parece que Jesús les encuentra la razón diciendo que su misión es solamente entre los suyos, los israelitas, el pueblo elegido de Dios.
Tercera sorpresa: Jesús responde – para nuestros oídos en forma ofensiva! Parece que no quiere atenderla. «No está bien tomar el pan que es de los hijos, y echarlo a los perritos.» ¿?
Cuarta sorpresa: Jesús queda sorprendido de la Fe de esa mujer y cambia su actitud.!!!
Y la hija quedó sana. Jesús es más fuerte que los demonios. La Fe de la mujer fue respondida.
Mateo y Marcos cuentan este episodio en su evangelio. Quieren contar que el reino de la misericordia de Dios es universal y para todos. Y parece que Jesús mismo tenía que aprender lo que significa eso en la práctica. Si bien su misión comenzó en primera instancia en Israel, no terminó allí, sino abarca a todo el mundo y es para todos.
El aspecto universal e inclusivo aparece en varias partes del evangelio. Ya en el primer capítulo Mateo menciona dos mujeres extranjeras en la genealogía de Jesús (Rajab y Rut) y en el segundo relata la visita de los reyes magos del oriente y de otra religión. En el capítulo 8 Jesús se admira de la Fe de un centurión (militar!) romano y dice: “De cierto les digo, que ni aun en Israel he hallado tanta Fe” Y les digo que muchos vendrán del oriente y occidente y se sentarán en el reino de Dios.” Y al final de su evangelio Mateo relata, como Jesús envía a sus discípulos a hacer discípulos a todas las naciones hasta el fin del mundo.
La Fe de esa mujer cananea que conmueve a Jesús está en contraste con la fe de los escribas y fariseos y también con la de sus discípulos. Los escribas y fariseos creían que ellos son los verdaderos creyentes en la verdadera fe, que es la fe en el Dios de sus escrituras y rituales, de su religión. Otras creencias no son válidas. Rechazaron a Jesús por enseñar de una manera novedosa sobre Dios y su reino. Ellos no se contaminarían conversando con una mujer pagana.
Los discípulos creían en Jesús. Se creyeron los elegidos y los verdaderos creyentes por seguir a Él. Pero no podían creer que una mujer extranjera, que arma un escándalo gritando por ayuda debe ser atendida.
¿Qué de la Fe de esta mujer sorprende a Jesús? ¿Qué tiene lo que ni los fariseos ni los discípulos tenían?
Pienso que en cada creyente siempre hay algo de la fe de los fariseos y algo de la fe de los discípulos que necesita ser superada por una Fe más profunda.
Por no distinguir entre creencias y Fe se pueden dar dos curiosidades entre “mas- o menos – creyentes”: Justamente los más creyentes (muy convencidos de sus creencias) muchas veces son los menos tolerantes y misericordiosos con otros. Y los menos creyentes (que ya no saben bien en que creer) son los más tolerantes frente a otras religiones y fácilmente dicen que todo en el fondo es lo mismo… Los dos están muy lejos de la Fe de la mujer cananea.
Me pregunté: ¿Qué diría Jesús sobre mi fe? Y pienso que diría algo como lo siguiente: “Siegfried, tu fe ha cambiado durante tu vida. En tu niñez y juventud te enseñaron las creencias de un cristianismo muy radical y exclusivo y tú trataste de vivir y predicar así. Te costó aceptar que otras personas pueden creer de otras maneras. Con los años te adaptaste a las realidades y ablandaste tus posturas. Tu fe hoy en día esta mezclada con muchas dudas y muy intelectualizada. Eres poco humilde y muy impaciente. Pero veo la desesperación en tu corazón. Y te quiero mucho porque has clamado por mi ayuda durante todo el tiempo y confiado en mi misericordia. Has mantenido, aunque bastante mediocre, la Fe. En un ambiente de gran superficialidad y en una iglesia que para muchos es más un club social exclusivo que una escuela de vida de Fe. Has luchado fielmente para que el fondo sea más importante que las formalidades y las tradiciones. Has crecido en una fe inclusiva y generosa.”
Te pregunto: ¿Qué diría Jesús sobre tu fe?
¿Será que ya no sufrimos como aquella mujer-madre bajo los tormentos de los demonios?
¿Será que vivimos tan acomodados en y a este mundo y nuestras creencias que ya no sentimos la urgencia y la pasión de gritar desesperadamente del fondo de nuestro corazón por la ayuda de Dios?
El ejemplo de la Fe de la mujer cananea nos invita a revisar nuestro corazón y nuestra fe y clamar:
¡Señor ten misericordia de nosotros. Señor, ayúdanos.
Creemos, pero queremos poder creer más profundamente, Señor, ayuda a nuestra poca Fe!
¿Podemos y debemos aceptar también la Fe en personas de otras religiones y creencias como aceptables delante de Dios?
Respuesta a: NO. La única fe que salva es la fe en Jesucristo. Si bien la mujer cananea era de otra religión, se dirigió a Jesús! Y es eso lo decisivo. Como lo dice el versículo citado al comienzo: “¿Quién es el que vence al mundo? El que cree que Jesús es el Hijo de Dios.”
Respuesta b: SI. Debemos aprender lo que el mismo Jesús aprendió en este encuentro: que Dios ve el corazón y no las creencias ortodoxas y las tradiciones religiosas. Dios es misericordioso y escucha todos los clamores auténticos de todos los corazones, sean cristianos o no, y responde.
Pablo dice en 1.Timoteo 4,10: “Si trabajamos y nos esforzamos es porque hemos puesto nuestra esperanza en el Dios viviente, que es el salvador de todos, especialmente de los que creen.”
¿Qué cree Usted?
Oremos en silencio
– y escuchemos la voz del Señor
– ¿qué te dice?
Amén
3º HIMNO: Danos un corazón (LLC 519)
Danos un corazón Grande para amar Danos un corazón fuerte para luchar Pueblos nuevos, creadores de la historia Constructores de nueva humanidad Pueblos nuevos que viven la existencia Como riesgo de un largo caminar Danos un corazón Grande para amar Danos un corazón fuerte para luchar Pueblos nuevos, luchando en esperanza Caminantes, sedientos de verdad Pueblos nuevos sin frenos ni cadenas Pueblos libres que exigen libertad Danos un corazón Grande para amar Danos un corazón fuerte para luchar
OREMOS EL PADRE NUESTRO
Una versión cantada